lunes, 1 de junio de 2009

Llorar es un Arte...

No entiendo por qué está tan arraigada en la mentalidad social que el llorar de tristeza es sinónimo de lamentarse.
Yo lloro mucho, no me privo de llorar, y detesto que me vean llorando, porque me preguntan qué me pasa y todos me terminan diciendo "qué sacas con llorar". Pues aquí les va la respuesta: se saca mucho, de hecho es lo más efectivo para sacarlo todo.
Porque yo casi nunca (si no es que nunca) lloro para lamentarme. Yo lloro simplemente porque tengo ganas, porque estoy cansada, porque tengo pena, porque tengo rabia, porque extraño, porque a veces me siento saturada, pero jamás para lamentarme.
Es tan simple como tener en cuenta lo siguiente: tengo las lágrimas a flor de piel, mi cuerpo y mente quieren desahogar tanta mala onda acumulada. No puedo cambiar las cosas ni pretendo que con el llanto cambien.
Pero cómo rayos funciona, porque no me reprimo, si quiero llorar pues lloro y cuando termino me siento como nueva y con más fuerza, optimista y llena de energía. Bueno, llena de energía no, lloro al punto de quedar agotada, porque quedo vacía de todo el pesar que venía acumulando, luego descanso, duermo tranquila porque no me quedaron fuerzas ni para soñar, y a la mañana despierto recargada.
El llanto no tiene que tener un motivo específico, y reprimirlo es como aguantarse ir al baño hasta que revienten los riñones teniendo un baño limpio al lado o cagarse de hambre por mero masoquismo.
Entonces doy vuelta la pregunta: ¿por qué no lloras? ¿Y, porqué a nadie le gusta ver llorar a los que quieren? Eso es un poco egoísta, todos tienen derecho a sentirse superados, y nada como una buena pataleta para drenar ese agotamiento.
A mí me encataría ver llorar a unas cuantas personas que adoro, solo para saber que no quieren cargar con ese cansancio, que aún tienen sangre en las venas, acompañarlas y llorar juntos para terminar muertos de risa después. ¡Cómo no ha de ser sano y renovador eso! Somos seres humanos, no máquinas, llorar es tan bueno y natural como reir, y hoy por hoy ambas cosas son vistas como ajenas a lo normal, ¿en qué nos estamos conviertiendo?
Y luego de rezar mando una sonrisa al cielo para decirle como Johnny a June "help me make through the night"... and through the day.

Una flor!
Ivy

2 comentarios:

La Gata Coqueta dijo...

Yo no le doy ni la minima importancia, cuando tengo ganas de llorar lloro y cuando tengo ganas de reir me rio indiferentemente, este triste o no no tiene nada que ver una cosa con la otra.

Como bien dices tu hay muchos motivos para ello y no tiene que ser dado por un disgusto, a demás yo soy muy sensible a casi todo y la lagrima anda suelta por menos de nada.

Según te iba leyendo hace dos días estaba con mi gordí como decis vosotros y me llamo por un nombre que hacia mucho que no lo hacia y de golpe me llevo a ese tiempo y momento y las lagrimas como una madalena y ya empezo a decirme no hay quien te diga nada... pero no puedo evitarlo y luego me quedo tan ricamente.

Un beso y un abrazo con todo mi afecto.

¡¡Feliz semana para todos aquellos que te acompañen!!

PD. Mi ausencia fue por motivos de salud espero me disculpes.

La Gata Coqueta dijo...

PASO A SALUDARTE Y DEJARTE UN ABRAZO DE ALEGRÍA Y ESPERANZA PARA QUE TODOS TUS SUEÑOS SE HAGAN REALIDAD.

UN BESITO Y QUE DISFRUTES DE UNA LINDA SEMANA.